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Dudas - Reputación ≠ Imagen


Ayer me preguntaba por la diferencia entre reputación e imagen corporativa. Una vez entendido qué era la reputación, pensé que el significado se asemejaba demasiado al concepto que tenemos de imagen de una empresa. Sin embargo, realizando varias consultas en libros de la biblioteca y archivos que iba encontrando por la web, creo que hoy puedo decir que SÍ, hay diferencias entre ambos conceptos. En su libro “la buena empresa”, Justo Villafañe, nos da algunas nociones sobre las disimilitudes que ambos términos tienen.

Si algo ha quedado claro en estas escasas dos semanas de curso es que ofrecer un concepto uniforme de reputación es algo complejo pero necesario para las empresas para que puedan, de algún modo, valorar los activos intangibles de la compañía. Como decía Sócrates, y Villafañe cita en su libro: “el modo de obtener una buena reputación es procurar ser lo que se desea parecer”. Y no podemos estar más de acuerdo.

De forma reciente, el término de Reputación Corporativa ha incluido cuestiones de carácter técnico, además de ético y social.

Para Charles Frombrun, de la Stern School of Business de New York, la reputación está asociada de forma necesaria a los stakeholders, es decir, a los inversores, empleados, proveedores, clientes y directivos de la organización. Y, en este sentido, considera que la reputación de cada empresa es el resultado de la habilidad de la misma para relacionarse con todos estos públicos; la unión racional y emocional de la entidad con los que forman parte de ella o, mejor dicho, con los que la forman. Ya que son estos quienes realmente conocen la empresa y la pueden valorar.

¿Qué mejor reputación puede generar que alguien que pertenece a una empresa hable bien de todos los ámbitos de su empresa?

Sin embargo, mientras la imagen se basa en percepciones, “la reputación es el resultado de comportamientos, de realidades objetivables. El primero se basa en la percepción y el segundo se fundamenta en la realidad”, por ello, la reputación “es suma de una realidad corporativa digna de ser reconocida como resultado de un buen comportamiento, excelencia empresaria, buena calidad…” y además del reconocimiento que de esa realidad hagan los stakeholders importantes de la organización.

Como decía Abraham Lincoln “la reputación es como un árbol y la imagen como su sombra. La imagen es lo que percibimos, el árbol es la realidad”, por ello, nadie mejor que los stakeholders para opinar sobre la entidad, ya que son realmente quienes la conocen de forma interna y comprenden, entre otras cosas, el grado de satisfacción de necesidades del publico interno, la personalidad corporativa, etc.

Espero que hayáis comprendido la diferencia entre Imagen y Reputación y que leer esta entrada os haya ayudado tanto como a mí escribirla para ordenar ideas y conceptos! Nos vemos en el próximo post!

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